
Lectoescritura global: Estrategias paso a paso para acompañar desde casa
Muchos niños aprenden mejor de forma visual y global. Reconocen una palabra como un todo, como si fuera una imagen. Esta forma de acceso a la lectura puede ser especialmente eficaz en autistas o en niños con un perfil atencional o cognitivo diferente.
Acompañar el proceso de lectoescritura desde casa es posible, respetando los intereses, los ritmos y las fortalezas de cada niño. Aquí comparto una guía paso a paso basada en el enfoque de lectoescritura global, con estrategias claras, funcionales y afectivas. Porque leer y escribir no es solo juntar letras: es comunicar, comprender y expresar.
1. Crea un ambiente rico en palabras
El entorno es el primer maestro. Cuando el niño ve palabras en su día a día, empieza a familiarizarse con la forma que tienen.
- Etiqueta objetos reales en casa: SILLA, PUERTA, VASO, LECHE, CUCHARA…
- Usa letras grandes y claras. Las mayúsculas ayudan al inicio porque son más uniformes visualmente.
- Las palabras deben ir acompañadas de la imagen correspondiente o del objeto real.
Consejo práctico: imprime etiquetas en papel grueso, plastifícalas y pégalas con velcro o blu tack. ¡Que el niño pueda tocarlas y quitarlas!
2. Elige palabras funcionales y significativas
No se trata de enseñar todas las palabras del mundo, sino aquellas que tienen sentido para el niño.
- Comienza por su nombre, nombres de personas importantes (mamá, papá, hermano), sus juguetes favoritos, comida que le gusta, palabras con carga emocional.
- Las palabras deben tener un uso concreto: quiero PAN, abre PUERTA, juega con TREN…
Ejemplo: si le encanta el agua, una de las primeras tarjetas será “AGUA”. Así la motivación guía el aprendizaje.
3. Presentación de la palabra escrita
El niño necesita tiempo para familiarizarse con la palabra como un todo.
- Presenta una tarjeta con la palabra escrita y la imagen.
- Hazlo de forma pausada, sin presionar.
- Repite varias veces en contextos cotidianos.
Consejo: no pedir que repita o lea al principio. El objetivo es que reconozca visualmente la palabra.
4. Asociación imagen – palabra – objeto real
Es fundamental que el niño comprenda que esa palabra escrita representa algo concreto.
- Muestra la tarjeta de “VASO” y entrega un vaso real.
- Juega a emparejar tarjeta – imagen – objeto.
- Usa gestos, mirada y entonación para reforzar la asociación.
Tip: puedes hacer un pequeño ritual diario con 3 o 4 tarjetas. Nada forzado, siempre desde el juego y el disfrute.
5. Juego de discriminación visual
Una vez que reconoce algunas palabras, pasa al siguiente paso: elegir la correcta entre varias.
- Coloca dos tarjetas: “MAMÁ” y “PAPÁ”. Di: “¿Dónde dice MAMÁ?”
- Puedes aumentar la dificultad progresivamente: tres, cuatro tarjetas…
Apoyo visual: asegúrate de que las palabras no se parezcan mucho entre sí al principio (no empieces con MESA y MASA, por ejemplo).
6. Reconocimiento sin imagen
Cuando haya familiaridad, puedes presentar la palabra sin imagen.
- El niño ya no necesita ver el dibujo porque la palabra escrita es ahora su propia imagen.
- Puedes invitarle a entregar el objeto correspondiente, emparejar con otro texto, señalar en la vida real…
Recuerda: si se pierde o no responde, vuelve al paso anterior.
7. Juego de emparejar palabra con palabra
El objetivo es reforzar la memoria visual y el reconocimiento global.
- Usa dos juegos de tarjetas. El niño debe emparejar cada palabra con su igual.
- Puedes convertirlo en un “memory” adaptado.
Sugerencia: si le gusta clasificar, ordenar o hacer parejas, ¡este paso le encantará!
8. Juego de formar palabras con letras móviles
A muchos niños les resulta más fácil construir la palabra antes de leerla fonéticamente.
- Usa letras imantadas, de madera o de cartón.
- Dale un modelo (una tarjeta con la palabra) y pídele que la forme con letras.
- Luego prueba sin modelo, a partir del objeto o de la imagen.
Variación lúdica: esconder letras por la casa y buscar las que forman una palabra determinada.
9. Lectura de frases cortas
Cuando ya reconoce varias palabras, es momento de combinarlas.
- “YO QUIERO AGUA”
- “MAMÁ COME PAN”
- “EL TREN VA”
Estas frases pueden acompañarse de una imagen o representarse con muñecos o gestos. ¡Que leer signifique actuar y comprender!
Actividad sugerida: crear un pequeño “libro de frases” personal, con fotos familiares y frases que el niño pueda “leer”.
10. Escritura espontánea y creativa
La escritura no es solo copiar. Es también jugar, inventar, comunicar.
- Invita a copiar palabras conocidas, sin forzar trazos perfectos.
- Usa materiales diversos: letras móviles, pizarras, arena, plastilina, palitos…
- Valora cada intento, cada trazo. Es parte del proceso.
Consejo emocional: elogia el esfuerzo, no el resultado. “¡Has formado MAMÁ tú solito!”
Consejos finales para acompañar con amor
- Respeta los ritmos. Algunos necesitan más tiempo para cada paso. No hay prisa.
- Observa los intereses. Si le encanta el tren, usa palabras relacionadas: RIEL, TREN, LOCOMOTORA, VÍA…
- Hazlo divertido. Canta, juega, dramatiza. ¡Leer y escribir también puede ser juego!
- Acompaña con afecto y confianza. La conexión emocional es la mejor base para cualquier aprendizaje.